miércoles, 27 de diciembre de 2017

PANORAMA 2018: LAS URNAS ABIERTAS DE AMÉRICA LATINA.

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EL MAPA ELECTORAL EN AMÉRICA LATINA PARA EL CALENDARIO 2018, es sumamente importante, en la perspectiva de que el escenario económico-social y político actual de una u otra manera favorece a la nueva derecha político-empresarial-neoliberal, no solamente producto de la crisis de los precios en el mercado internacional, producido a partir del 2015 - caídas muy profundas y permanentes que han originado, serias críticas y reflexiones sobre el futuro de América latina en relación a si mantiene o logra salir del viejo modelo extractivo-exportador de materias, - modelo heredado desde la colonia y aún vigente y hegemónico en varios países del continente. Sumado a ello está presente en el escenario - y sigue “pegando con fuerza” la CORRUPCIÓN, desde el “terremoto político” que ha producido la corrupción política de la empresa brasileña ODEBRECHT en todos los gobiernos de  América latina - desde la primera década del siglo XXI -.

La corrupción en la política, originó que el “terremoto político” acabó con toda una GENERACIÓN DE POLÍTICOS CORRUPTOS - la mayoría hoy en la cárcel  por haber traicionado la CONFIANZA  de la Ciudadanía, haber entregado la SOBERANÍA NACIONAL de sus países a cambio de unos millones de dólares, pero la corrupción avanzó más allá, liquidó  a los “viejos partidos políticos” envenenados por la corrupción y convertidos  en “tiendas comerciales y/o agencias de negocios” de intereses nefastos y oscuros de ciertos “líderes políticos” entregados al “manjar” de la coima, y además se presentó un tercer elemento importante, que los gobiernos progresistas, democráticos y de Izquierda en América latina, no avanzaron en lo POLÍTICO, simplemente se quedaron “satisfechos”, con los resultados positivos alcanzados en el “mundo de las políticas sociales”.

La lucha contra la pobreza relativa y la extrema pobreza, fue el gran éxito de sus Políticas sociales, pero a la vez fue el nuevo escenario político-social, no abordado, marginado, olvidado, por la POLÍTICA - sacar a millones de la pobreza - se presenta nuevos sectores sociales muy exigentes en cuanto a DERECHOS SOCIALES - Educación, Salud, Servicios Públicos, Transporte, Comunicación, Cultura, Medio Ambiente, etc.- No considerados por los Gobiernos democráticos, tomando en consideración que este nuevo ESCENARIO del siglo XXI, presentaba una “nueva realidad social” producto del propio crecimiento macro-económico y el ascenso de una “NUEVA CLASE MEDIA”, que en realidad exigía condiciones de DERECHOS SOCIALES - que antes el Estado y las propias políticas neoliberales, NO las tenían presentes, y ahora exigía de los gobiernos democráticos, atender, solucionar estas “nuevas demandas sociales”, sin embargo, en realidad al haberse marginado, “olvidado” este “nuevo escenario”, la derecha político-empresarial - presente en especial desde los MEDIOS DE COMUNICACIÓN logran “entrar” comunicarse con los voceros y representantes de esta “Clase Media”, poderosa -en cuanto logran movilizarse, primero, y después forjar un “Frente Único” de lucha y demandas sociales, centrados básicamente en Educación, Salud, Servicios Públicos, - reclamaciones que logran empatarse, unirse, con los amplios sectores sociales, salidos de la pobreza.

Nuevo conjunto de contextos sociales - unidos, centrados y movilizados - en problemas propios - pero que los gobiernos democráticos, NO podían atenderlos, presentar una alternativa de solución, porque la crisis continua y los precios de los Commodities en el mercado internacional se vinieron por los suelos- coyuntura, hábilmente aprovechada por la derecha, desde los medios de comunicación, y como primer paso enfrentarlos al gobierno -serios cuestionamientos políticos sociales que no pudieron ser atendidos, - la nueva realidad político-social, superó la “postración política” de los gobiernos y sus “partidos políticos” ya envenenados por la corrupción.
 


El escenario político en América latina, para el 2018, se sumamente convulso, múltiple, complejo y Multipolar, realidad que ha despertado - después de un sueño o una derrota a la Izquierda Democrática y hoy compite en condiciones de desventaja institucional, mermado, criticado muy fuerte en lo Político, contra la Derecha político empresarial. Una mirada político-dialéctica, hoy está llevando a la Izquierda a comprender que la Derecha en los gobiernos - Argentina, Brasil, México, Colombia, etc. - que  NO tienen Programas de Gobierno que llevan a los pueblos a salir de la CRISIS - sus programas políticos, sus propuestas y alternativas - son muy “viejas y conocidas”  que vienen desde 1990 - Las Políticas del Consenso de Washington fracasadas - en los diferentes contextos y tiempos continentales y mundiales, y los resultados hoy los vemos, simplemente una Mirada Política lo que hoy sucede en Argentina - un inmenso escenario de clases y lucha de clases - la movilización, la protesta - la calle y la plaza pública, ha sido recuperado por el Pueblo, por la Ciudadanía - y la incapacidad del gobierno de NO tener alternativas de Solución y fácilmente recurre a la REPRESIÓN.

Los escenarios ELECTORALES del 2018, para nosotros, desde una mirada Político local-global, se presenta sumamente favorable para la Izquierda democrática. La derecha perdió el “hilo conductor de la historia” NO tiene salida política ante la CRISIS. Pero la IZQUIERDA Democrática, debe y es urgente realizar un proceso interno democrático de CRÍTICA Y AUTOCRÍTICA, con la finalidad de “limpiar” la POLÍTICA del cáncer de la CORRUPCIÓN, aún estamos a tiempo, de asumir esta gran responsabilidad política y compromiso con el futuro de las nuevas Generaciones - incluso en base a las Nuevas Agendas Políticas, salir progresivamente de los cómodos  “salones de la izquierda liberal”, avanzar políticamente en los difíciles - pero no imposibles - escenarios de políticas anti-neoliberales, que en primer lugar nos lleve. nos conduzca a salir del “viejo modelo extractivo exportador”, segundo fortalecer la POLÍTICA - el partido político de la izquierda democrática - forjando Nuevos Liderazgos Comunitarios - principalmente - con la finalidad de entrar a este nuevo proceso político latinoamericano en condiciones “superiores” a la Derecha Político empresarial - hoy ahogada y asfixiada - con el viejo modelo neoliberal y sus políticas de liquidación de los DERECHOS SOCIALES de los Trabajadores, del pueblo y el “temor” que aún tiene esta derecha de no poder hacer realidad su "SEGUNDA REVOLUCIÓN CONSERVADORA" - ahora la privatización de la Educación y la Salud - y la destrucción política de los DERECHOS LABORALES. A trabajar - limpiar internamente la política capturada por la corrupción - la calle y la plaza Pública, los espera para unirse, movilizarse y defender sus Derechos. El escenario político social es altamente favorable para la Izquierda Demorática en toda Nuestra América, la Patria Grande. Los pueblos nos están esperando, con su CONFIANZA como columna vertebral de este nuevo proceso político para la Izquierda Democrática en todo el Continente desde México, pasando América Central y Sud-América.

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PANORAMA 2018: LAS URNAS ABIERTAS  DE AMÉRICA LATINA.
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Gerardo Szalkowicz.

Rebelión miércoles 27 de diciembre del 2017.


Mientras el planeta Tierra va completando otra vuelta alrededor del Sol, empieza a asomar lo que será un año de alta intensidad electoral para América Latina, con escenarios definitorios de fuerte peso e incidencia que marcarán el rediseño del mapa político regional.

La agenda 2018 trae elecciones presidenciales en Brasil, Venezuela, México, Colombia, Paraguay y Costa Rica, además del recambio de mandatario en Cuba; disputas que prefijarán si se consolida la hegemonía conservadora revitalizada en los últimos años o si se abre camino un eventual reimpulso de las fuerzas progresistas.

Las madres de todas las batallas.

Los principales centros de gravedad serán sin duda Brasil y Venezuela. En el Gigante del Sur, Lula copa la escena como principal favorito según propios y extraños. Hasta el diario Folha de São Paulo –vocero de la oligarquía paulista- le da una intención de voto mayor al 35%. Unos 20 puntos debajo se ubica el militar retirado Jair Bolsonaro, otro símbolo del crecimiento de la ultraderecha mundial. El “Trump brasileño”, aquel que en el impeachment a Dilma jurara por el coronel que la torturó en la dictadura, tiene en su acervo frases como "los negros no sirven ni para procrear”, "sería incapaz de amar a un hijo homosexual" o "no te violo porque no lo mereces". Más atrás aparecen Marina Silva (REDE) y Geraldo Alckmin (PSDB). El partido de Michel Temer (PMDB) ni siquiera figura en la categoría “otros”.

Mucho podría cambiar en la geopolítica latinoamericana si el PT vuelve a gobernar Brasil, la principal economía de la región. Para eso, Lula tendrá que sortear la ofensiva judicial: el Día D será el 24 de enero, cuando se ratifique o no la condena a nueve años y medio por el caso Lava Jato. Todo indica que el futuro del ex mandatario estará en prisión o en el Palacio de Planalto.

En Venezuela, después de reencauzarse la disputa política al terreno democrático, empieza a palpitarse lo que será otra elección clave para América Latina. Sin fecha confirmada (sería octubre pero se podría adelantar), el chavismo va por la reelección de Nicolás Maduro, mientras la derecha atraviesa una etapa de agudo desconcierto, fracturada en cinco pedazos y huérfana de liderazgos potables.

El 2017 estuvo marcado por la feroz ofensiva internacional -diplomática y mediática- contra el gobierno venezolano y el intento insurreccional opositor neutralizado con la Asamblea Constituyente. La recuperación del chavismo se ratificó en las elecciones regionales (consiguió 19 de las 23 gobernaciones) y municipales (ganó el 92% de las alcaldías). Pero si la revolución bolivariana recompuso fuerza en el terreno político, su supervivencia se jugará en el plano económico: si el gobierno logra revertir su ineficacia frente a un sabotaje que hace más de cuatro años asfixia la cotidianeidad de la población. México: ¿la tercera es la vencida?

El principal condimento de los comicios mexicanos del 1° de julio son las altas chances presidenciales de Andrés Manuel López Obrador. Luego de perder con serias denuncias de fraude en 2006 y 2012, va por la vencida. Por el peso económico del país azteca y por ser la puerta de entrada al Norte, también el ajedrez político regional viviría una alteración importante si la centroizquierda gana tras décadas de neoliberalismo narco-criminal.

Su principal rival es José Antonio Meade, quien buscará la continuidad del PRI después de un nefasto sexenio de Enrique Peña Nieto. Tecnócrata de pura cepa, Meade fue funcionario público por más de 20 años y nunca compitió por cargos de elección popular. El tercero en discordia será Ricardo Anaya, aspirante por la extraña coalición entre el derechista PAN y el otrora centroizquierdista PRD.

El otro elemento significativo es la irrupción de los pueblos originarios en el terreno electoral. Impulsada por el Congreso Nacional Indígena y con apoyo del zapatismo, se abre paso la candidatura de la médica tradicional María de Jesús Patricio Martínez, conocida como Marichuy, una apuesta que oxigenó la vapuleada democracia mexicana.

Colombia: la paz también se juega en las urnas.

Las presidenciales del 27 de mayo tendrán como telón de fondo la implementación de los acuerdos de paz, por lo que el principal vector del debate previo gira en torno a las posturas frente al posconflicto, en medio de un escenario de gran apatía.

Si bien aún faltan cocinarse las alianzas definitivas, cinco candidatos encabezan los sondeos. La derecha dura estará representada por el uribista Iván Duque y por el ex vicepresidente Germán Vargas Lleras. También figuran con buena intención de voto el ex alcalde de Bogotá Gustavo Petro (centroizquierda) y el ex gobernador de Antioquia Sergio Fajardo. Más atrás aparece Humberto de la Calle, jefe negociador de la paz en La Habana. Como novedad, estará el debut de las FARC convertida en partido político.

Colombia decidirá no sólo la conducción del país sino también la impronta que tome el fin del conflicto armado más largo en la historia continental. Y qué ocurra frente a otras urgencias como el recrudecimiento del paramilitarismo que dejó en 2017 más de 130 líderes sociales asesinados.

Otros escenarios electorales.

“Cuando la Asamblea Nacional se constituya, habrá concluido mi segundo y último mandato al frente del Gobierno y Cuba tendrá un nuevo presidente”. Así anunciaba Raúl Castro que el próximo 19 de abril culminará el proceso electoral cubano con la designación de un mandatario que, por primera vez en seis décadas, no llevará el apellido Castro. Se prevé que el elegido sea el actual vicepresidente Miguel Díaz-Canel.

En Paraguay, la disputa del 22 de abril será entre el oficialista Partido Colorado, que presenta a Mario Abdo Benítez (hijo del ex secretario del dictador Alfredo Stroessner) y Efraín Alegre, de la alianza entre el Partido Liberal y el Frente Guasu, del ex mandatario Fernando Lugo destituido con el golpe parlamentario de 2012.

El año electoral en la región arranca el 4 de febrero en Costa Rica. Tres de los 13 candidatos despuntan en medio de una gran apatía e indiferencia: Juan Diego Castro, un abogado famoso por su discurso de mano dura, y los dos representantes del viejo bipartidismo, Antonio Álvarez (Partido Liberación Nacional) y Rodolfo Piza (Partido Unidad Social Cristiana). Casi sin chances aparecen el gobernante Partido Acción Ciudadana (PAC) y la izquierda del Frente Amplio.

Mientras el futuro de América Latina se disputa en diversos terrenos (la lucha en las calles seguirá siendo un factor clave), en el plano electoral se viene un año de gran intensidad que marcará la deriva política regional. 

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GERARDO SZALKOWICZ es periodista y editor de Nodal. Colabora en diversos medios como Tiempo Argentino, TeleSUR, Rebelión, Kaos en la Red, ALAI y otros. Conduce el programa radial “Al sur del Río Bravo” por Radionauta FM. Coordinador, junto a Pablo Solana, del libro “América Latina. Huellas y retos del ciclo progresista”.

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